Peculiaridades

lunes, 30 de julio de 2012

Cosas que hace una madre


Cosas que hace una madre#1
Comprar una cámara desechable subacuática para inmortalizar a tus retoñas haciendo la nutria en la última clase de natación del verano, guardarla en la bolsa de la piscina y, tras descubrir al llegar a ésta que la retoña mayor la sacó y la ha dejado olvidada en el campo, salir del agua, dejar a la niña con el monitor y tu hermana, ponerte el vestido otra vez, salir chorreando agua hasta el coche, llamar a tu esposo al móvil, hacer que suba con el coche y la camarita, esperarlo en la calle al sol mientras sigues goteando, ignorando las miradas de las -por fortuna- pocas personas que se cruzan, trincar la cámara al paso de Consorte, volver adentro, quitarse el vestido, meterse en el agua y tirar 27 fotos de tus niñas y tu sobrina.
Todo eso, para descubrir al final que la penca camarita, supuestamente estanca, está inundada de agua, y sólo salen unas pocas fotos de tal minipecera. Grrrrr...

Cosas que hace una madre#2
Volver a matricularlas al año siguiente en el curso y contratar además un bono de diez horas para hacer nado libre a la misma hora cuando se entera de que la retoña chica ya ha llegado a la edad en que no necesita que los padres entren con ella. Pasarse la hora de natación vigilando que la chica no se ahogue pese a los dos monitores del grupo, más la socorrista y la monitora de vestuario que están pendientes de ellos, porque no te fías al cien por cien, siendo tus temores completamente infundados. Aun así, hacer nota mental de ir a comprarle un gorro naranja fosforescente en lugar del azul que tiene, y si puede ser con lucecitas, para que la vean mejor. Desaprovechar la oportunidad de admirar a los cachas que se entrenan en la calle de al lado en favor de aplaudir el estilo de braza de la mayor. Y finalmente, perder media hora por salir del agua a la vez que tus hijas para que se puedan duchar contigo, para descubrir que las dos pasan olímpicamente de ti para quedarse con la Seño de vestuarios, que no por nada llevan cuatro veranos con ella.

Cosas que hace una madre#3
Afirmar de manera rotunda e inequívoca que NUNCA JAMÁS DE LOS JAMASES vestirás igual a tus niñas porque la sola idea te resulta vomitiva, y luego ponerte a buscar por cielo, tierra y mar dos conjuntitos, camisetas, complementos y demás abalorios de vestimenta idénticos pero en tallas con cinco años de diferencia, porque a tus niñas les da igual lo que hayas pensado tú toda tu vida y les hace ilusión salir a la calle como las infantitas en el Hola.

Cosas que hace una madre#4
Vender cien papeletas, cien, del número de lotería de la AMPA, superando su natural repulsa al abordaje de desconocidos talonario en mano cual gitana vendiendo romero, y pasearse con ellos en el bolso hasta en misa dominical por si queda algún vecino del barrio sin llevar, porque luego toca y todos llevan menos tú, venga anda ya, si son tres euritos, niña...

Cosas que hace una madre#5
Abominar del deporte futbolístico toda tu vida y presumir de que no has visto ni un solo partido de la selección, aprovechando cuando sucedían para irte de rebajas, al parque o a Disneyland, para terminar haciendo a mano treinta pompones de animadora rojos y amarillos a partir de bolsas de plástico, luciendo la camiseta roja frente a todo el cole de tus niñas, y bailando junto a la clase de tu niña mayor el OOOOOHHHH de Bisbal, habiendo estudiado previamente el calendario de la Eurocopa no vaya a ser que dé la casualidad que eliminen al conjunto patrio antes del día del baile y hagamos el ridículo más espantoso. Los niños, en todo caso, porque servidora ya lo ha dado...
Y encima, acabar viendo la final por primera vez en su vida, con la camiseta, la cara pintada, los pompones, y tener que reconocer que quizás, puede, a lo mejor, en ciertas ocasiones, el fútbol puede tener su puntito. :-)

Cosas que hace una madre#6
Apuntarse a ser la secre de la AMPA, la delegada de p/madres de la clase de la mayor, al año siguiente ser también de la de la chica, meterse en el consejo escolar, consentir en que la cacen con lazo para meterla en la comisión permanente y todo ello, sin ver por ninguna parte el jamón que le regalan a los ALTOS CARGOS... como no sea el que una misma aporta para meter en el pan el día del desayuno molinero, tras partir cuatrocientas barras de pan...

Cosas que hace una madre#7
Asistir un año entero a catequesis, otro año entero a misa dominical sin saltarte una, confesar tras veinte años sin hacerlo y salir en la procesión del Corpus del barrio cantando a grito pelao tras la Custodia, renunciando a tu íntimo desapego con la Iglesia oficial, porque a tu niña le hace ilusión hacer la comunión con sus amigos y compañeros de clase y no que tú te la lleves a otra parroquia o hagas homeschooling eucarístico.

Y muchas cosas más, pero me tengo que ir a admirar a los cachas de la calle de al lado nadar mientras mis niñas están en su curso en la piscina.

domingo, 29 de julio de 2012

Lecturas de verano I: Va de sombras

No de las siniestras que se nos vienen encima cuando la prima de riesgo haga catapúm, ni las del callejón de tu barrio por el que no pasas de noche así tengas que dar un rodeo cargada con tres bolsas del Puturrú... Hablo de la trilogía de moda en las librerías, en las descargas del kindle y en el patio de mi manzana (que no es particular, pero sí se moja como todos los demás)...


Supongo que no esperaríais de mí una crítica de una obra de Proust o un texto al uso de un blog serio, ¿no? Menos mal, porque no la vais a tener. Por otro lado, sí, ¿qué pasa? Me he leído los tres libros y además compulsivamente. Tanto que no pude esperar a que mi señor Consorte me los pasara al librolestrónico y lo tuve que hacer yo solita, aun a riesgo de provocar una catástrofe cibernética (No soy muy ducha en interneteos. A mí me saca usté del feisbuk, mi correo y trastear por San Gúguel y me pierdo como tó Dios).

Bueno, al lío. A mí me ha gustado. Claro, si no no estaría haciendo la crítica. No nos llevemos a engaño: ni a la autora le van a dar el Nobel ni el argumento difiere mucho del de cualquier telenovela del mediodía. Es como si  Corín Tellado hubiera ido de tuppersex, seguido de unas copitas y de vuelta a casa se hubiese encontrado a los de Callejeros haciendo un reportaje sobre un simpático club de adultos, y todo ello la hubiera inspirado para escribir una novela de las suyas con aderezo picante. De hecho, la inspiración original lo fue más ídem. Inicialmente, los protagonistas no eran Anastasia Steele y Christian Grey, estudiante universitaria y empresario, sino Bella Swan y Edward Cullen, estudiante de instituto y chupasangres vegetariano. Los de Crepúsculo, vaya. De hecho, cualquiera que se haya leído la otra saga identifica perfectamente ciertos paralelismos. (Sí, yo la he leído, ¿qué pasa? Y en inglés. Como buena Pecu.) Tampoco es que se llevara la acción muy lejos: de Forks a Seattle. E. L. James escribió un fanfiction llamado Master of Universe basado libremente (y alegremente) en la saga, que se hizo tan popular que acabó reescribiéndolo eliminando cualquier referencia a vampiros inmortales y chicos lobo y la publicó en una editorial electrónica. Pegó tal bombazo que ya es éxito mundial y dicen que Angelina Jolie se está pensando protagonizar la versión cinematográfica. La verdad es que no termino yo de verla en el papel, y no porque le falten méritos, que ya se sabe que si yo fuera lesbiana llevaría su foto en la cartera, sino porque no la veo yo precisamente sumisa...

El mérito que se le puede reconocer a la trilogía es, aparte de su tremenda difusión, el que esté haciendo que a lo largo y ancho del planeta, mujeres que no hablaban de estos temas en público se atrevan ahora a recomendarlo a la vecina y aderezar de paso su vida personal. Personalmente, echo en falta más variedad en el género, y me atrevo a lanzar una sugerencia: necesitamos novelas de este tipo, donde los protagonistas sean más cercanos. Donde Anastasia y Christian se llamen Marimerche y Manolo, sean cajera del Supertodo y desempleado en reciclaje y búsqueda activa de empleo, con dos niños de corta edad, se muevan en un citroen Saxo de segunda mano y no en helicóptero y Audis, y vivan con los padres de ella porque no les llega para el alquiler. Y aun así, tengan alegría por la vida y ganas de mejora en el terreno del débito conyugal. Estoy segurísima de que también sería un bombazo e inspiraría a muchas... ¿O quizás no engancharía lo mismo?

sábado, 28 de julio de 2012

Me lo pedíais tanto...

...que al final he picado :)


Y ahora, ¿de qué hablamos? ¿Maternidad, crianza del pulpo en cautiverio, los últimos recortes del top ten o el tiempo atmosférico?


Se admiten sugerencias...


PD. Mientras sugerís, voy a aprovechar para investigar este mundillo, poner derechos los cuadros, sacar el polvo, ya sabéis...